Después del regreso de la Semana Santa, retomamos los temas vistos
anteriormente en clase. Para empezar,
recordamos un poco acerca de los vicios del lenguaje, en que consistían y cómo
se identifica cada uno de ellos. Entre los vicios estudiados encontramos el
cosismo y el alguismo, seguido de la cacofonía y las muletillas, y por último,
la mala ubicación de los signos de puntuación.
Estos temas los repasamos con el fin de
enfocar y centrar al estudiante sobre los últimos temas tratados en clase.
Asimismo, luego de recordar estos conceptos, se realizaron dos exposiciones que
abarcaron los siguientes temas: el pleonasmo, las pobrezas del lenguaje, el
eufemismo, la impropiedad, el anacoluto, el gerundismo y finalmente, el
neologismo.
Por lo que se refiere al pleonasmo, es una expresión o figura retórica
que consiste en emplear uno a más términos que resultan innecesarios y redundantes
para el sentido de una oración. También, puede ser considerada como la excesiva
abundancia o redundancia de las palabras utilizadas en una frase.
Algunos ejemplos claros en los cuales observamos el pleonasmo son:
- luz brillante
- lo vi con mis propios ojos
- sube para arriba
- entra para adentro
- métete adentro
- comete la comida
En cada uno de estos ejemplos es evidente el pleonasmo empleado, pues al
decir luz brillante, se da por entendido que la luz ya es brillante o
reluciente, por lo tanto, no es necesario explicar o repetir esta
cualidad.
Así pues, al identificar pleonasmos dentro de un texto, estos resultan
incómodos y redundantes, dificultando la interpretación de las frases, razón
por la cual se buscan diferentes formas para evitar caer en este vicio. No
obstante, existe la figura retórica opuesta al pleonasmo: el oxímoron. A
diferencia del pleonasmo, este consiste en emplear dos conceptos de dos
vocablos diferentes en una misma expresión, convirtiendo la oración en un texto
legible y comprensible a la vista. En ciertas ocasiones, el oxímoron funciona como un sentido
metafórico, dado que su significado puede resultar absurdo o
incoherente.
Para el ejemplo de la luz brillante, al cambiar un término por otro, se
modifica el significado o la interpretación de la frase, pues al querer
prevenir la repetición de palabras, se remplaza el término brillante por su
contrario, quedando de la siguiente forma: luz oscura. Otro ejemplo de oxímoron
lo podemos apreciar en la siguiente frase: "la droga ofrece un placer
doloroso". Este ejemplo puede sonar incoherente si se piensa en como algo
que es placentero es doloroso al mismo tiempo. Por un lado se interpreta que el
consumo de drogas genera una sensación agradable, pero que a su vez trae
consigo consecuencias que afectaran a la persona en un futuro.
Por otro lado, cuando se habla de la pobreza del lenguaje, se hace
referencia a la repetición de palabras y al uso de términos con significados
extensivos. Esta pobreza se genera debido a la falta de léxico o vocabulario
que poseen algunas personas al momento de expresar una idea. Como ejemplo
tenemos las palabras hecho, cosa, algo, hacer, decir, tener, poner, ya que, sin
embargo, etc. En muchas ocasiones, estas palabras poseen una función de
"comodín", por culpa de su amplio significado.
Sin embargo, algunas de las formas para evitar la pobreza del lenguaje
es a través de la lectura, de modo que ésta incrementa nuestro léxico y nuestro
vocabulario. Asimismo, el uso de diccionarios o sinónimos, impide la repetición
de palabras, dado que nutre nuestra redacción, volviéndola de igual forma más
estética.
En lo concerniente al eufemismo y la impropiedad, estos son otras de las
ramas que hacen parte de los vicios del lenguaje. En primer lugar, cuando se
reemplaza una palabra que puede sonar agresiva por otra que logre suavizar el
texto, hacemos referencia al eufemismo; en cambio, el concepto de impropiedad
se utiliza cuando se emplean o aplican términos incorrectos en una frase.
Para finalizar, realizare una breve descripción sobre los últimos tres temas
restantes. Tomaremos en primer lugar el anacoluto. Este se entiende como aquel
cambio que se efectúa en la construcción de una frase y que da como resultado
una inconsistencia. En esta construcción se rompe el orden lógico y gramatical
del mensaje por la falta de coherencia entre los elementos de una oración. En
segundo lugar, se habla sobre el gerundismo, método que refiere a la excesiva
utilización de los verbos en el gerundio, teniendo en cuenta que la aplicación de éste se fundamenta en una acción simultánea a
otra, pero no sucesiva. Y por último, tenemos el neologismo, que son
aquellas palabras, significados o hitos nuevos en el idioma.
Una vez entendido todos los conceptos anteriormente descritos, somos conscientes que es de vital importancia estudiarlos para extender nuestros conocimientos, reconocer los vicios que constantemente utilizamos y de esta forma evitarlos en la medida posible. Este ejercicio nos ayudará a fortalecer nuestro lenguaje y la manera en que nos expresamos, pues primero tenemos que conocer nuestra propia lengua para así saber aplicarla de la mejor manera.
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